viernes, 27 de septiembre de 2013

Gnomito piscinero


Y es que yo no tengo un niño, tengo un pececillo en casa.

Cuando era muy muy bebé, ya empezamos a informarnos sobre los beneficios de la matronatación en bebés. Mejora de motricidad, sistema cardio-respiratorio y no sé cuántas cosas más.

Como ya os he contado en otras ocasiones, soy usuaria de Groupalia, Groupon y otras páginas de ofertas similares. Un buen día y gracias a una de mis mamis madrileñas, topamos con una oferta para un mes de matronatación en un centro cercano a nuestra casa. Podían ir bebés a partir de 6 meses, y el Gnomito tenía 7, así que adelante!!

Nos encantó la experiencia. Podíamos entrar uno de los dos con él a la piscina, el otro miraba desde una cristalera. Así que nos turnábamos, una clase cada uno ya que a los dos nos apetecía mucho entrar con el peque a la piscina.

Con solo 7 meses ya usó una especie de flotador, sumergió la cabeza, incluso se tiró al agua desde el bordillo (sentado claro). La clase era a última hora de la tarde así que nos llevábamos el pijama y al llegar a casa solo era tomar su bibe y dormía plácidamente.

Nos encantó a todos la experiencia. Solo fuimos un mes porque la oferta se terminó, y ya era el mes de mayo y quedaba poco para el verano.

Durante el verano el Gnomito se ha bañado todos los días con sus abuelas, por la mañana y por la tarde. Ya cuando se ve en bañador y le decimos "al agua patos?" se emociona muchísimo. Le da un poco de impresión el agua fría pero no va más allá de soltar un suspiro. Enseguida empieza a chapotear, a moverse como una ranita, agitando brazos y piernas, cada vez lleva mejor las inmersiones y pocas veces traga agua, y le encanta que le sentemos en el bordillo y tirarse al agua. Se lo pasa pipa en el agua.

Así que hemos vuelto a apuntarle para este curso. Lleva dos semanas y de momento genial. Ahora que es más mayor todavía expresa más la emoción y patalea mucho más. Además, cada dos por tres mira y saluda al que está detrás del cristal, ya sea Papi o yo.

Me encontré el primer día con una madre de un niño de edad parecida y me dijo que su hijo ya iba el año pasado, y que apenas faltó, a pesar de los virus de guarde. Su pediatra le dijo que solo la otitis o conjuntivitis sería motivo para faltar a la pisci. Mocos, tos, incluso décimas de fiebre...no hay problema, incluso mejoran con la piscina.

De hecho, el Gnomito lleva unos días con sendos cirios colgando de su naricilla, despertándose por las noches porque no respira bien, etc. Ayer tuvo piscina y oye, esta noche la nariz despejadísima!! Hemos pasado de oír a Darth Vader respirando a través del intercomunicador, a no oír nada en toda la noche.

Veremos a ver cómo seguimos ahora que ya vienen los fríos!!


2 comentarios:

  1. Fenomenal! y enhorabuena por la mejoría de los moquetes.Da gusto leer lo mucho que disfrutais juntos!

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  2. Una de las cosas que más me ha gustado de este año ha sido bañarnos en la piscina. Es como un baño de suero para los mocos, sobre todo porque la mía es de sal. Pregunté para empezar a ir a matonatación en invierno, pero me sale carísimo porque tengo que pagar mi cuota de gimnaso aunque no lo utilice.
    De todos los beneficios que pueda tener para el bebé, creo que el mejor es divertirse con sus padres.

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