Hoy estoy de lunes, muy cansada tras el último madrugón del Gnomito, con picor de ojos por mi alergia al polen, y con una semana dura en el trabajo.
Pero me voy a animar el día rememorando lo que ha sido nuestro fin de semana, que ha sido muy intenso y hemos visto a un montón de amigos.
Empezamos por el viernes, que tuvimos la visita de unos amigos que vinieron a casa con su nena de casi un mes de vida. El Gnomito no deja de sorprendernos! Con su corta edad y su carácter cariñoso y afable nunca me hubiera pensado ver en él esta actitud...LOS CELOS!
Y es que era verme coger a la bebé en brazos y agarrarse a mi pierna con un lamentoso mamáaaaaa, mammmmmáaaaaa...Pobrecito mío. No me lo esperaba para nada. No le valía que tuviera a la bebé en un brazo y con el otro le abrazara y besara a él...no....me quería entera y en exclusiva.
Así que me tocó disfrutar a la bebé menos de lo que me hubiera gustado! El estado de ánimo del Gnomito se torció con la visita de su nueva amiguita y ya le tuvimos enrabietado hasta que se fue a la cama. Uf! Nos deja agotados cuando se pone así. Esa noche se despertó varias veces y en una de ellas lloraba y decía "nene nene" "tete tete"...para mi que soñó con la bebé, ya que durante su visita estuvo llorando y le decíamos que la bebé lloraba y que había que ponerle el chupete.
Sabéis el dicho ese de..."no querías sopa? pues toma dos tazas"....
Al día siguiente fuimos a conocer a OTRO BEBÉ, de otros amigos. Este con solo 9 días de vida. Una vez más el Gnomito volvió a sorprendernos, y es que en esta ocasión, estos amigos nuestros tienen 2 perros. En nuestra familia nadie tiene perro, así que el contacto del Gnomito con los perros hasta ahora era solo de cruzarnos con alguno por la calle. Pues oye, hicieron buenas migas!! Tanto que Papi pudo tener en brazos al pequeño bebé, y nuestro peque ni se inmutó. Solo un poquito...pero en cuanto se cruzaba alguno de los perros ya le teníamos entretenido.
Y ayer domingo, fuimos a comer a casa de otros amigos nuestros, que viven en una casa grande y con jardín, con 3 hijos y un precioso labrador. Así que pasamos un día estupendo. El Gnomito de momento pasa bastante de los demás niños, pero disfrutó muchísimo del jardín y la casita que tienen puesta, y de su perro. Toooodo el día se lo pasó persiguiendo al perro al grito de "wawaaaa!!". O bien el perro persiguiéndole a él cuando tenía comida en la mano!
Disfrutamos mucho viéndole jugar con el perrito, y corretear por el jardín. Además, el fin de semana nos ha servido para aprender dos cosas nuevas, el Gnomito siente celos de los bebés, y le encantan los perros!!
Este pequeñín no deja de sorprendernos!
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